| domingo, 6 de abril de 2008 | 14:20


ENHORABUENA, RAFAEL
Acaban de concederle a Rafael Chirbes el Premio de la Crítica por su novela Crematorio -Anagrama-. Estuve con él en el Cervantes de Belgrado, y puedo asegurar que aparte de su excelencia literaria, es un buen tipo. Experto en vinos, con una cultura enciclopédica y una forma de analizar la realidad entre copa y plato realmente apabullante.
Siempre ha dicho que para ser novelista no hace falta ser muy listo, sólo hay que tener otra manera de mirar o hacerlo desde el sitio desde el que normalmente nadie mira. Y que la vida de un escritor es como la de un jugador de ruleta, puedes haber jugado 2000 veces, pero la siguiente partida será siempre la primera. La frase que le ha servido de inspiración es una de Balzac: La novela es la vida privada de las naciones. Pues lo dicho: enhorabuena, Rafael.